Esta es una entrada de esas curiosas, de esas en las que cuento anécdotas referentes al tema del que hablo en el blog. Y en este caso lo que voy a contar tiene que ver con mis muñecas Kayla hechizos mágicos (digo muñecas porque tengo dos, una que me regalaron más estropeadita, y otra que yo compré a una amiga).